NUESTRA HISTORIA
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17 años de experiencia para un proyecto totalmente nuevo

Tres personas en la cocina, dos hombres de pie y una mujer al fondo, preparando comida sobre una encimera con cuencos y utensilios.
Una persona firma un documento con un bolígrafo sobre una mesa, un plato blanco y un bolígrafo cerca.
Tres jóvenes cocineros de uniforme, con la mirada fija y concentrada en un plato de la cocina.

Entre bastidores, hemos construido laboriosamente una organización sólida. El punto crucial en el que trabajamos es adaptar nuestra experiencia a las expectativas precisas de nuestros clientes.

Entendemos que nuestros participantes vienen ante todo a conocerse, relacionarse y pasar un buen rato juntos, y esto ha guiado todas nuestras decisiones: nuestros talleres deben ser amistosos, agradables y centrados en la creación de vínculos. En cuanto a las recetas, están pensadas para transmitir técnicas útiles y fáciles de repetir en casa.

Un cocinero prepara un plato de comida con verduras y pescado sobre una mesa de madera.
Un joven con uniforme de chef habla con alguien en una cocina profesional.
Dos cocineros preparan tomates y pepinos en una cocina profesional.
Cocineros hablando en una cocina interior profesional con paredes de ladrillo, con delantales morados.

De acuerdo con nuestro enfoque de circuito corto, hemos tenido cuidado de seleccionar exclusivamente recetas francesas diseñadas con un enfoque de residuo cero y adecuadas tanto para principiantes como para participantes experimentados. Cada taller se ha diseñado para que cada participante, sea cual sea su nivel, pueda encontrar su lugar y prosperar en nuestro taller.

También hemos hecho de la contratación de líderes competentes, sólidos y solidarios una cuestión de honor, capaces de manejar la presión y asumir el liderazgo, sabiendo al mismo tiempo dar un paso atrás cuando es necesario.

Esta organización es la culminación de 17 años de experiencia en el sector, centrada en satisfacer las expectativas de nuestros clientes y garantizar auténticos momentos de éxito.
Sin dormirnos nunca en los laureles, perfeccionamos cada día nuestro enfoque, preservando al mismo tiempo los sólidos cimientos que constituyen nuestra fuerza.

Un hombre con uniforme de cocina sostiene un manojo de zanahorias con follaje verde, en una cocina.
Un joven cocinando, con uniforme blanco y delantal morado, concentrado en su tarea.